Nueva York, Estados Unidos – El diálogo y la acción multilateral como instrumentos de respuesta a los problemas del desarrollo sostenible, y los cambios políticos, sociales y económicos que experimenta el Ecuador fueron los temas abordados por el presidente de la República, Lenín Moreno, durante su intervención en la 74ª Asamblea General de las Naciones Unidas, que se efectúa en Nueva York.

El Mandatario ecuatoriano destacó los principios sobre los cuales se fundamenta el accionar de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y mostró preocupación por los intentos sostenidos para debilitar la cooperación internacional y devaluar el trabajo de aquella. En este contexto, invitó a los países a ahondar esfuerzos para enfrentar los desafíos urgentes, como el abuso a gran escala a los derechos humanos, la pobreza generalizada, las crecientes desigualdades y las amenazas a la paz y la seguridad internacional. El Jefe de Estado alertó sobre el riesgo de la proliferación y el uso de armas de destrucción masiva, motivo por el cual Ecuador ratificó el Tratado de Prohibición de Armas Nucleares.

Señaló que la propuesta de su Gobierno del Gran Acuerdo Nacional dentro del país se sustenta en un contexto “que define la acción de las naciones (…) Hablo de los derechos fundamentales de las personas, que constan en la Constitución del Ecuador, en la Carta Universal y en los tratados internacionales que protegen las garantías políticas, económicas, sociales y culturales, incluidos los derechos con relación a la naturaleza”, dijo Moreno.

Al respecto recordó que el Ecuador, hace un año, se convirtió en el quinto país del mundo en ratificar las 18 convenciones de Naciones Unidas para la protección de los derechos humanos. “Si en algo aspiro a que mi Gobierno sea recordado, es por su profunda convicción y trabajo; por la protección, promoción, respeto y disfrute efectivo de los derechos humanos y las libertades fundamentales”, reiteró.

Recalcó que durante su gestión se ha logrado recuperar la institucionalidad democrática, el respeto a la opinión de ciudadanos y medios de comunicación, las garantías para la acción de políticos opositores y organizaciones ciudadanas, y la eliminación de entidades burocráticas que fueron creadas para expandir el poder del Estado. Líneas de trabajo que –afirmó- están directamente relacionadas con la Agenda 2030.

“Con decisión y constancia logramos desmontar un ‘Estado de propaganda’. Se dejó sin efecto una ley que amordazaba a los periodistas, se suprimió una institución que trataba de acallar a la prensa y se eliminó un servicio de inteligencia que, en lugar de proteger los intereses de la colectividad, se dedicaba a grabar conversaciones privadas de los ecuatorianos y a fisgonear la vida de los políticos opositores”, acotó.

Sostuvo que los cambios efectuados en el país cuentan con el respaldo y reconocimiento internacional; por ejemplo, Ecuador acogió las visitas de los relatores especiales para la libertad de expresión y opinión de las Naciones Unidas y la OEA, así como de los relatores sobre Pueblos Indígenas y Salud Física y Mental; además, ha vuelto a participar en los foros de derechos humanos del Sistema Interamericano. Todos ellos, hechos que hace poco eran impensados.

Sobre la situación en Venezuela, manifestó que Ecuador ha acogido alrededor de 500 mil migrantes a quienes, a pesar de las limitaciones económicas, se les ha prestado la atención necesaria. En este contexto llamó a la comunidad internacional a sentarse a dialogar con las víctimas del conflicto con el objetivo de encontrar una salida a la “catástrofe que ha provocado un gobierno irresponsable y de facto.”

Con respecto a la protección al ambiente, el Mandatario resaltó las acciones tomadas por su Gobierno como el establecimiento de créditos preferenciales para la movilidad sostenible, la firma del Pacto de economía circular con el sector productivo para una nueva economía del plástico, entre otras.

Finalmente, el presidente Moreno pidió a los líderes del mundo que el principal pilar de su gestión sea el respeto a los derechos humanos, económicos, sociales y culturales. “Sueño con el día en que midamos el desarrollo por la cantidad de personas con discapacidad incluidas plenamente, la evolución por la ausencia de la violencia de género y el progreso por cuántos valores y principios se manejan en el aula de clases, en la prensa y en las urnas”, mencionó.

Durante esta jornada, la presidenta ad honórem del Plan Toda Una Vida, Rocío González, se reunió con la primera dama de Costa Rica, Claudia Dobles, con quien compartió la visión de que los servicios como escuelas, colegios, centros de salud, transporte, estén próximos a los programas de vivienda y cubran las necesidades de las familias. Además, comunicó la experiencia del trabajo que se realiza en la misión Casa Para Todos, con la cual se fomenta la construcción de comunidades.

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