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La Revolución Ciudadana reinstitucionalizó al Estado

Quito (Pichincha).-  Bajo el pretexto de que el Estado es un “mal administrador”,  a finales de la década de los 70 y principios de los 80,  gobiernos de derecha fueron aplicando en América Latina la corriente neoliberal, cuyo principal objetivo era privatizar todo, incluyendo los servicios básicos como educación, salud, agua, luz; y, otras áreas como la telefonía, seguridad social, etc.

En Ecuador, ese escenario se fue consolidando más adelante. Amparados en el paradigma de la “modernización del Estado”, en gobiernos como el de Sixto Durán Ballén (durante los 90), se privatizaron sectores estratégicos como el de las telecomunicaciones, los hidrocarburos e incluso el sector eléctrico.

En el entonces Congreso Nacional se aprobó la Ley de Modernización, base jurídica de las privatizaciones e hilo conductor de la creación del Consejo de Modernización del Estado (CONAM), como ejecutor de dicha Ley.

La presidencia de Abdalá Bucaram, Jamil Mahuad y Lucio Gutiérrez  (por mencionar algunos mandatarios –todos derrocados por el pueblo-) no mejoraron el panorama.

Y ese fue el escenario con el que se halló el actual Mandatario de la Nación, Rafael Correa Delgado.

“Nosotros encontramos un Estado destrozado, el Estado desertor y lo poco que quedaba era un Estado burgués (…) representando y resguardando sólo los intereses de unas cuántas élites, por lo que hemos debido reconstruir el Estado y no uno burgués sino uno popular”. Así se refirió el Presidente de Ecuador, a la tarea que ha debido enfrentar, en su afán de consolidar el Socialismo del Siglo XXI, principal propuesta de campaña de hace 6 años, cuando arrancó su carrera hacia Carondelet.

La nueva Constitución elaborada en Montecristi, en el 2008 y aprobada por la mayoría del pueblo ecuatoriano, contribuyó a desarrollar esa reingeniería del Estado que incluyó funciones como las de Participación Ciudadana y Control Social.

“Pero sobre todo a nivel del Ejecutivo, hemos avanzado mucho, reorganizamos este poder; tenemos ocho ministerios coordinadores, cada uno con sus ministerios sectoriales, con sus instituciones. Por ejemplo, en la política económica, se incluye a la banca pública y tenemos mucho control de Gestión”, sostuvo el Mandatario en una entrevista concedida a la cadena Telesur.

Allí también habló del mecanismo que aplica el Gobierno para monitorear que los objetivos planteados por su Gestión se cumplan. Se trata del Sistema de Control Gubernamental (Sigob), donde constan los diferentes proyectos y compromisos asumidos por las Carteras de Estado y sus etapas de cumplimiento. Sin embargo, para el próximo año se espera aplicar un proyecto aun más ambicioso, el Gobierno por Resultados, que constará con indicadores para cada institución y dentro de cada institución por unidad, así lo explicó el Mandatario ecuatoriano.

“Eso nos permitirá entre otras cosas, (aplicar) el salario variable, en base a objetivos. Es decir, tomar lo mejor del sector privado: que la gente tenga incentivos para trabajar más; y del sector público: ver que no se vele por intereses privados sino por el bien común”, añadió.

Para explicar mejor el sistema a aplicar, el Jefe de Estado puso un ejemplo: “En un hospital, se podrá medir el número de cirugías que hace un cirujano -por decirle algo-, si este cirujano es de la unidad de cirugía plástica se medirá el desempeño de esa unidad y se medirá el desempeño del hospital y por esos tres niveles -individual, de unidad y de hospital- se le pagará una remuneración variable, en función de objetivos”.

Para finalizar, en la entrevista concedida al periodista uruguayo Walter Martínez, conductor del programa Dossier, transmitido por Telesur, Correa Delgado aseguró que se ha mejorado muchísimo en la institucionalización del Estado, en la eficacia y en la eficiencia de la administración pública. ER/El Ciudadano