La Noche Cultural reunió al Presidente con sus mandantes en Chicago

Chicago (Illinois).- Miles de ecuatorianos residentes en esta ciudad se reunieron en el Copernicus Center para disfrutar de una tradicional Noche Cultural junto al Presidente de la República, Rafael Correa.
Estas reuniones, entre compatriotas y el Primer Mandatario, se han realizado en varios países donde residen los ecuatorianos y se efectuó por primera vez en Chicago.
Por esto, la alegría y el compromiso de estos ciudadanos migrantes fue evidente. Aquí se reunieron ecuatorianos de todas las provincias del país que dejaron su tierra, la mayoría, tras las dificultades financieras que dejó el nefasto feriado bancario hace aproximadamente quince años. Pese a estar lejos, todos reconocen los cambios estructurales que ha dejado el proceso de Revolución Ciudadana que inició hace nueve años con el liderazgo de Rafael Correa.
Marta Morocho, por ejemplo, abriga su anhelo de volver al país pronto. “Ha cambiado muchísimo y estoy agradecida con el Presidente”, dijo en relación al Ecuador que hoy luce distinto al de hace apenas una década.
“El mayor impacto que ha tenido el Presidente es que ha apoyado muchísimo a la educación y la autosuperación de las personas”, reflexionó la mujer, quien destacó la necesidad de profundizar el desarrollo no sólo a través del trabajo de su Mandatario sino de todos.
Wilson Vásquez, quien vive en Chicago hace quince años, también reconoce los nuevos tiempos que caracterizan al país desde hace una década, al igual que Patricio Martínez, quien vino desde Quito hace diez años. “Tener un personaje tan importante como el Jefe de Estado y que haya venido a dar una charla es algo muy bueno”, dijo.
El Primer Mandatario, en un emotivo discurso, aseveró que el Ecuador le debe mucho a sus migrantes a quienes calificó como héroes. “No se imaginan lo emocionado que estoy”, dijo ante los repetidos aplausos de los ciudadanos que esta noche acudieron al recinto incluso con sus hijos pequeños.
Recordó que vivía en Illinois cuando el país se desmoronó en 1999 tras la crisis bancaria que desembocó hasta en el cambio de moneda. ‘Yo como estudiante tenía una indignación terrible’, recordó. “Gracias a Dios, todo eso está cambiando compañeros. Sin embargo ese pasado quiere volver (…) prohibido olvidar lo que ocasionó el modelo neoliberal”, añadió.
José Mora, cuencano, reflexionó que ahora donde vivien sus padres, en el Azuay, pueden verse carreteras de primer orden, lo que antes no ocurría. “Veo que muchas cosas están yendo para mejor, agregó.
Timoteo Tito, al igual que otros compatriotas, dejó el país cuando se cerraron las oportunidades de progresar. Hoy, casi veinte años después, reconoce que Ecuador es un país diferente. “Y eso marca muchísimo, por eso quiero volver a mi país”, puntualizó.
Tras esto, la música y la danza puso el toque cultural a una noche inolvidable que une, una vez más, a miles de ecuatorianos con su Presidente. /SD/ El Ciudadano